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martes, 23 de marzo de 2021

CÓMO HACER UNA CARPETA DE CEMENTO (CON CAÑOS DE LUZ)

Generalidades

 

Un paño de material bien plano y nivelado, cualquiera sea su destino (revoque grueso, carpeta de cemento para circulación o para colocación de piso, etc.), no puede construirse a ojo. Necesita un diseño ajustado y una construcción correcta. Por eso hay que hacerlos a partir de puntos y líneas de referencia sobre los que apoyarse para llegar a esos resultados buscados.

En el caso particular de las carpetas de piso, tradicionalmente, se construyen realizando fajas, niveladas, del mismo material (concreto) sobre las que se deslizan las reglas que le van a dar la cara final. Ese método se describe acá.

 

Las carpetas hechas usando caños de luz

 

Una manera de acelerar los tiempos, cuando se trabaja con fajas de material, es acelerar el proceso de fragüe del cemento. Eso se puede lograr agregando yeso a la mezcla, o haciéndola con cemento de fraguado rápido. De cualquier manera obliga a tener esos materiales en la obra, y también implica un costo mayor. Y no siempre garantiza que la faja endurezca los suficiente para poder usarla en el día.

Por eso se puede recurrir a este método de reemplazar las fajas de material por caños de luz, nivelados y bien amurados, que pueden usarse prácticamente en seguida después de ser colocados. Y conviene que sea así para poder retirarlos, también, en el día para que estén disponibles para ser reusados en el siguiente trabajo.

 

Procedimiento de construcción de una carpeta usando caños de luz

 

Obviamente habrá que comenzar por definir el nivel de piso, lo que nos va a dar el nivel de la carpeta correspondiente. Es muy útil representar el nivel del piso terminado (NPT) como una línea continua, sobre las paredes alrededor del ambiente en el que se está trabajando. Eso se muestra en la figura 1.


 

Figura 1

 

De cualquier manera a veces es suficiente con marcar el nivel de piso terminado, NPT, solamente en las esquinas del ambiente, y a mitad del tramo si el ambiente fuera más largo, tal como se muestra en la figura 2.

 


Figura 2

 

Seguidamente se colocan los extremos de los caños de luz según el nivel que indiquen las marcas de NPT, menos el espesor del piso y el del material de colocación (pegamento). Esto se ve en la figura 3.

 


Figura 3

 

Se puede revisar el nivel de los caños de luz con respecto a la marca intermedia, y también asegurarlo con material, como se muestra en la figura 4.

 


Figura 4

 

Hecho esto sólo resta rellenar todo el espacio inferior del caño con material para que ningún tramo quede en el aire y sin apoyo, tal como se ve en la figura 5.

 


Figura 5

 De otra  manera el peso y el movimiento de la regla podrían hacer que el caño se doble y  se baje, generando una depresión en el nivel de la carpeta de cemento. A la vez que podría mover y despegar el caño de luz obligando a tener que volver a empezar el trabajo de nivelación nuevamente.

 

Finalizada esta preparación de los caños-guía se procede de la forma habitual, llenando los espacios entre  de luz, cortando son una regla metálica (o de buena madera y que esté bien derecha). Y en la medida que las carpeta vaya “tirando”, esto es comenzando a endurecer, se puede rellenar alguna zona que haya podido quedar baja; y terminar el trabajo alisando con fratacho de madera. Si la carpeta tuviera como destino ser transitable se puede terminar con llana metálica, espolvoreando la superficie con cemento en polvo, con el objeto de generar una capa superficial más resistente al desgaste.

 

Recapitulando

 

  •          Para acelerar el trabajo al hacer carpetas de cemento se pueden reemplazar las tradicionales fajas de concreto por caños de hierro de electricidad amurados. De esa manera se evita tener que esperar el fragüe del concreto, sobre todo en regiones, o en estaciones del año, muy húmedas;
  •          Definidos los niveles del futuro piso se procede a amurar los extremos de los caños según las marcas de referencia;
  •          Para más seguridad conviene nivelar y amurar también el tramo medio del caño;
  •          Se rellena luego, todo a lo largo, la parte inferior del caño;
  •          Se llena los paños de la manera tradicional y se “corta” el concreto, deslizando las reglas sobre los caños;
  •          Se termina con fratacho o con llana metálica, según el destino final que se va a dar a la carpeta
  •      Se deberán retirar los caños inmediatamente para poder limpiarlos y volver a usar.


Te puede interesar: carpetas de cemento para la colocación de pisos

 

 

domingo, 14 de marzo de 2021

EL BUSCAPOLOS, SU USO SEGURO

Definición

 

El buscapolos es una herramienta, de uso en instalaciones eléctricas, cuya principal función es detectar la existencia, o no, de corriente en un cableado. Además permitirá saber cuál es el cable que “trae” la corriente. Esto es, cual es el cable de fase, o cable “vivo”: el cable que más peligro puede presentar durante su manipulación.

 

Si querés más información general sobre buscapolos, la podés encontrar acá.

 

Tipos de buscapolos

 

Si bien puede haber algunas variantes más, podemos destacar dos tipos principales:

  •          El buscapolos tradicional, con forma de destornillador liviano, y con algunos componentes electrónicos en su interior, pero donde el cuerpo de quien lo está usando juega un papel importante;
  •          El buscapolos electrónico inductivo, de funcionamiento a pilas o baterías, que no necesita del físico del usuario para indicar las mediciones.

 

La seguridad en el buscapolos tradicional

 

El buscapolos tradicional tiene la forma de un pequeño destornillador, muy bien aislado eléctricamente, que sólo deja al descubierto sus extremos. Uno de ellos se pone en contacto con la zona a medir (en el orificio de un tomacorriente, el extremo de un cable pelado, el gabinete metálico de algún aparato, etc.) y el otro extremo, el de la cabeza del mango, debe ser tocado por el usuario para que su cuerpo le dé continuidad al paso de la corriente hacia tierra, posibilitando así obtener la lectura  correspondiente (existencia o no de energía eléctrica). Este funcionamiento se ve bien en la figura 1.

 


Figura 1

 

Contado de esta manera, resumida, el uso del buscapolos tradicional parece una herramienta sumamente peligrosa. Y en cierto modo lo puede ser, si no se tienen en cuenta algunas consideraciones:

  •          Es cierto que si no se toca el extremo metálico en el mango el buscapolos no va a funcionar. Y el otro extremo está metido en la boca de un tomacorriente, o tocando un cable pelado. Pero, internamente, tiene una resistencia que reduce la corriente a valores tan bajos que son inofensivos para el cuerpo humano. Si bien alcanzan para encender el neón que nos va a indicar la existencia de corriente eléctrica;
  •           Al comprar este tipo de buscapolos se lo debe elegir entre marcas de reconocido prestigio, para evitar defectos de funcionamiento por baja calidad de materiales;
  •          Aun usando buscapolos de buena calidad hay que revisarlos antes de cada uso para verificar que nos se hayan deteriorado accidentalmente;
  •          Es conveniente usar calzado con suelas aislantes (puede ser calzado deportivo), como medida de seguridad adicional (su uso no impide que el buscapolos funcione correctamente);
  •          Mientras se estén haciendo mediciones con el buscapolos hay que evitar que alguna parte del cuerpo toque elementos metálicos que estén en contacto con la tierra (marcos de puertas, gabinetes de electrodomésticos, etc.)
  •          Una seguridad adicional (que todavía no está presente en todas las instalaciones eléctricas) sería la existencia de un disyuntor diferencial que nos proteja en caso de alguna fuga de corriente.

 

La seguridad y el buscapolos electrónico inductivo

 

El buscapolos inductivo, a diferencia del anterior, no necesita que el usuario entre en contacto con la corriente eléctrica. Ni necesita que la parte metálica de los cables esté al descubierto para poder funcionar. Ni hay que tocar el contacto eléctrico interno de un tomacorriente, lo que aleja cualquier riesgo de un evento peligroso. Ver figura 2. Consta de un cuerpo de material plástico aislado, con un sistema electrónico en su interior, alimentado por pilas o baterías, que produce un sonido intermitente y enciende una luz cuando detecta polaridad. Es decir, presencia de corriente. Permite hacer las mediciones a través de la aislaciones plásticas, siempre y cuando no se superen los 2 o 3 mm de distancia o de espesor.

 


Figura 2


Conclusión

 

Por todo lo antes dicho el buscapolos electrónico inductivo es más seguro que el buscapolos tradicional, si bien aquel, usado adecuadamente, tampoco debería representar riesgos para el usuario. Sin olvidar que, en ambos casos, se está  trabajando con instalaciones en las cuales la energía eléctrica está presente, por lo cual valen todas las medidas de seguridad que se aplican en el manejo de la electricidad en general.


Recapitulando

 

Cuidados mínimos necesarios al usar buscapolos

  •          Usar calzado con suelas de goma (no necesariamente de seguridad);
  •          Verificar que se no esté pisando suelos húmedos;
  •          Comprobar el buen funcionamiento antes de usarlo;
  •          Verificar el  buen estado de conservación de la herramienta;
  •          No usarlos en tensiones mayores a 500 volts de corriente alterna;
  •          Verificar que la instalación eléctrica tenga instalado un disyuntor diferencial (hace que el trabajo sea más tranquilo y confortable).

 

 

 

martes, 9 de marzo de 2021

CARPETAS BAJO PISO (DE CEMENTO Y CAL)

Definición

 

Una carpeta bajo piso es una carpeta cuyo fin es nivelar un contrapiso, una losa o una platea, para poder colocar, sobre ella, un piso de terminación. Por lo tanto no necesita ser particularmente resistente al desgaste como lo deben ser aquellas que van a ser transitadas, ya sea temporaria o permanentemente. Estas carpetas bajo piso podrán ser indicadas para zonas interiores o exteriores, y los pisos que podrán recibir podrán ser de distintos tipos:

  •          Cerámicos o porcelanatos, colocados con pegamentos cementicios;
  •          Vinílicos o de goma, colocados con adhesivos sintéticos;
  •          De parquet o entablonados, clavados, atornillados o pegados;
  •          Flotantes, de varios materiales, simplemente apoyados.

 

Tipos de carpetas bajo piso

 

Cada uno de los distintos tipos de pisos va a necesitar una carpeta diferente. En esta entrada nos vamos a referir a las carpetas bajo piso que van debajo de productos de terminación (cerámicos, porcelanatos) que se colocan con pegamentos cementicios, tipo klaukol.

 

Solo vamos a hacer una distinción entre carpetas para zonas interiores y carpetas para zonas exteriores. Los agentes climáticos (humedad, altas temperaturas, congelamiento, etc.) exigen que una carpeta exterior sea algo más resistente que una que estuviese protegida por la construcción misma.

 

Carpetas bajo piso interiores

 

Reiterando que hablamos de carpetas que no van a ser transitadas, las carpetas bajo piso interiores podrán ser realizadas con una mezcla de materiales de cal, cemento y arena que podríamos denominar como cal reforzada.


Su composición mínima sería:

 

1 parte de cal común

+

3 partes de arena                   como proporciones para su preparación en obra

+

¼ parte de cemento 


O también:

 

5,90 kg/ m2 de cal común

+

0,03 m3/m2 de arena             como datos para calcular los costos de materiales

+

3,10 kg/m2 de cemento  

 

Se recomienda que este tipo de carpetas bajo piso tengan un espesor algo mayor (al menos 2,5 cm) que el de una carpeta de concreto 1:3 (2 cm de promedio).


Cálculo de materiales para carpeta interior de 2,5 cm de espesor

Para calcular los materiales se introduce, directamente, la superficie de la carpeta a realizar, en metros cuadrados (m2) y solamente se la multiplica por la incidencia de cada material:



Tabla para el cálculo de carpetas bajo piso de cemento y cal

 

A continuación un ejemplo de como usar la tabla para calcular materiales:



Ejemplo


Entonces, para una carpeta de 24 m2 vas a necesitar: 

  • 141 kg de cal común (7 bolsas de 20 kg, o 6 bolsas de 25 kg)
  • 0,72 m3 de arena (aprox. 3/4 m3 de arena)
  • 74,4 kg de cemento (1 bolsa y media de cemento) 

Carpetas bajo piso exteriores

 

Las carpetas bajo piso exteriores tendrán que tener algo más de resistencia por lo que la proporción de los materiales será la siguiente:

 

1 parte de cal común

+

1 parte cemento

+

5 partes de arena

 

Teniendo en cuenta que, en este caso, la proporción de lo aglomerantes (cal, cemento) es más importante, y más costosa, tal vez convenga, para carpetas bajo piso exteriores, no correr riesgos y optar por una carpeta de concreto (de 1 parte de cemento por 3 partes de arena) tradicional, para obtener mayor resistencia, no sólo contra los agentes climáticos sino, también, contra algún movimiento de los contrapisos, sobre todo cuando se trate de obras sobre terreno natural.

 

Aquí vas a encontrar una planilla que te permite calcular la cantidad de materiales necesarios para  hacer carpetas de concreto (sólo cemento) de distintos espesores.  

  

 

 

sábado, 27 de febrero de 2021

¿QUÉ ES UNA CÉLULA FOTOELÉCTRICA?

Descripción 

Lo que, habitualmente, llamamos, en las instalaciones eléctricas domiciliarias, una célula fotoeléctrica es un dispositivo electrónico, sensible a la luz, que permite controlar el paso de la corriente eléctrica. También se la suele conocer como fotocélula, o fotocontrol. Y en algunas regiones, tal vez más adecuadamente, interruptor crepuscular. De cualquier manera, en el comercio y entre los miembros del gremio de los electricistas se la conoce, así, como célula fotoeléctrica. Aunque hay que destacar que células fotoeléctricas son también los dispositivos que componen, por ejemplo, un panel solar, de esos que generan energía eléctrica para el consumo.



Célula Fotoeléctrica

De cualquier manera nuestra célula fotoeléctrica es un aparato que se instala para que determinadas luces se prendan, o se apaguen, de acuerdo a la luminosidad exterior existente. Es decir que poco después del amanecer se activa, apagándolas, y poco antes del anochecer se desactiva, encendiéndolas. Todo automáticamente. Sin embargo para que un momentáneo cambio en la luminosidad (por ejemplo, oscurecimiento por el paso de una nube o iluminación por las luces de un auto) no la active las células cuentan con un sistema de retardo, del orden de pocos segundos. De esa manera no perjudica la vida útil de las lámparas, encendiéndolas y apagándolas innecesariamente.


                                           


   Célula Fotoeléctrica

 

Aspecto físico y funcionamiento

 

Las células fotoeléctricas suelen tener la forma de una cápsula, de material plástico resistente a la intemperie, con la parte superior translucida para que la luz del sol la pueda hacer funcionar. De esa formas esa luminosidad va  a generar una pequeña corriente eléctrica que, a su vez va a actuar sobre un interruptor electrónico, abriendo el circuito que alimenta a la lámpara, apagándola. Cuando la luz del sol se oculte la pequeña corriente eléctrica desaparece, el interruptor se vuelve a conectar y las luces se encienden.

Las células fotoeléctricas de uso común funcionan con todo tipo de lámparas (incandescentes, de bajo consumo, LED, de descarga, etc.) y las de uso doméstico, en general, permiten el control de luminarias de hasta 500 Watts.



Célula Fotoeléctrica

 

Cómo se conecta una célula fotoeléctrica

 

Las células fotoeléctricas más comunes se instalan sobre el cable que conduce la corriente hasta el artefacto de iluminación, o lámpara, que se quiera controlar. En general se las suele instalar justo antes de aquello a lo que se quiera encender o apagar, por una cuestión de costumbre o comodidad. O porque, a veces,  es al único punto de la instalación que está a la intemperie, en contacto con la luminosidad exterior. Pero perfectamente se podría colocar en cualquier punto del recorrido del cable que alimenta a la luminaria. Inclusive hay artefactos de luz que ya traen incorporada la célula fotoeléctrica con lo cual nos ahorra el trabajo de tener que conectarla como un dispositivo independiente.

  


Célula Fotoeléctrica

Cuando se instala la célula en forma independiente habrá que prestar atención a las instrucciones que provee el fabricante para su  conexión. Para que funcione correctamente y, sobre todo, para no dañarla irremediablemente. Estas instrucciones suelen estar impresas en el envase en el que viene presentado el producto. Y hay que respetarlas, porque cada célula suele tener una manera particular de conexión recomendada. También se suele indicar allí la posición en la que conviene fijarla con respecto a la incidencia de la luminosidad ambiente. En general, cuanto más expuesta a la luz quede, con la parte traslucida hacían arriba, más rápido va a reaccionar y, con ello, menos tiempo va a mantener las luces encendidas. En cambio si se la fija con la parte traslucida hacia abajo, y en alguna zona en penumbras, más va a tardar en reaccionar, más tiempo va a mantener las lámparas conectadas, afectando su durabilidad y la economía  del consumo de energía.

 


Célula fotoeléctrica

Al conectar una célula fotoeléctrica hay un punto al que hay que prestar especial atención: cuidar que quede lejos de la influencia de la propia lámpara. Esto es: que la luz que emite la lámpara que ha sido encendida no vaya actuar sobre la célula, provocando que se vuelva  a apagar.  Porque podría pasar que el conjunto célula-lámpara se convierta en una iluminación intermitente: primero la oscuridad hace que la célula prenda la lámpara, después la lámpara ilumina la célula haciendo que se apague, entonces en la oscuridad la célula vuelve a encender la lámpara, la que vuelve a iluminar a la célula, y apagarla. Y así, sucesivamente, hasta el infinito. O hasta que la luz del día interrumpa el ciclo. Que se va a reiniciar al anochecer. Por eso hay que tener cuidado al fijar la célula fotoeléctrica en su posición. Tiene que quedar bajo la influencia de la luz solar, pero no de la de la propia lámpara.

 

Recapitulando

 

  •           La célula fotoeléctrica controla el paso de la corriente, activada por las luminosidad ambiente exterior;
  •          Se instala sobre los cables que alimentan de energía eléctrica a las luminarias;
  •          Funciona con cualquier tipo de lámpara y, generalmente, hasta 500 Watts;
  •          Debe fijarse de manera tal que la parte traslúcida (blanca) de la cápsula apunte hacia el origen de la luminosidad exterior, pero que no sea afectada por la luz de la propia lámpara;
  •         Deberá conectarse de acuerdo a las instrucciones del fabricante.

 

 

domingo, 14 de febrero de 2021

¿SE HINCHÓ LA PUERTA? ¿Y NO CIERRA?

Sí, hay veces en que las puertas (las hojas) se hinchan, como en el caso de las puertas de madera, las que, al absorber la humedad ambiente, aumentan de tamaño y presentan dificultades para abrir o cerrar. Inclusive, de acuerdo a la estación del año, pueden “agrandarse” o “achicarse” alternadamente, cada 5 o 6 meses. Pero no este el caso del que vamos a hablar.

 

La humedad de cimientos y los marcos de las puertas

 

En este caso vamos a hablar de otro de los problemas que pueden tener las puertas. Suele ocurrir que, en construcciones antiguas, en las paredes que están afectadas por el problema de la humedad de cimientos, los materiales de la mampostería y los revoques se alteren bastante, al punto de afectar también a los marcos de las puertas. En estos casos las paredes también “se hinchan” y van apretando los marcos contra las hojas, dificultando su apertura y cierre. En la foto 1 se muestra un ejemplo de este problema. En ella se ve como la luz libre que hay entre el marco y la hoja de la puerta, a la altura de la cerradura, va disminuyendo hacia abajo hasta finalmente “desaparecer”.

 


Foto 1

 

Este fenómeno puede ocurrir en cualquier tipo de marco. Es decir, de cualquier material. Pero se agrava en los marcos de chapa o de perfiles de hierro porque, al problema que genera la humedad en la mampostería, se le suma el efecto que, también, produce sobre el hierro. Una pieza de ese material, al oxidarse, va desprendiendo capas o láminas de material oxidado que tienen mayor volumen que el hierro original. Sumando los dos aumentos de volumen por humedad la luz libre entre el marco y la puerta, como en el ejemplo, va desapareciendo.

 

¿Y qué podemos hacer?

 

En este tipo de problemas no hay muchas soluciones posibles. Al menos que sean relativamente simples. Una hoja de puerta de madera se puede lijar, cepillar y hasta cortar, a veces, para achicarla y resolver el problema. Pero en este caso, en el de las aberturas de chapa de hierro, de perfiles, de aluminio, etc. esa solución no es aplicable. En estos casos no hay más remedio que corregir el marco. Y  para eso hay que liberarlo de la presión que le está aplicando la pared.

 

Foto 2

 

En la foto 2 de nuestro ejemplo vemos que la luz del marco a la altura de la cerradura es de 65,3 cm mientras en la foto 3 se ve que esa luz se redujo a 64,6 cm a la altura del zócalo. Se perdieron 7 mm que es más de lo que la puerta puede tolerar para seguir funcionando correctamente.

 


Foto 3

 

La solución radica en liberar el marco de la mampostería que lo sostiene. Y para eso hay que picar y retirar el material en, por lo menos, 50 o 60 cm de la altura de la puerta, contando desde el suelo. Logrando así que el marco vuelva a si posición original. En la foto 4 ya se hizo ese trabajo y se ve claramente que, con solo retirar el material que producía la  presión, se recuperó buena parte de la luz libre entre el marco y la hoja.




Foto 4

 

Nota: cabe aclarar que en la foto de este ejemplo se demolió la pared hasta el exterior porque se va a provechar para hacer un trabajo de reconstrucción de la capa aisladora horizontal. Pero no siempre es necesario ese paso. Si el problema no es muy grave, o si la pared es muy ancha, alcanza con retirar solo el material en la zona del problema, en una de las caras de la pared.

 

Cómo asegurar la luz libre de la puerta

 

Recuperada la luz libre de la puerta sólo queda tomar las medidas necesarias para que esa luz se conserve. Se podría amurar el marco nuevamente esperando que, sólo con eso, quede en la posición necesaria. Pero es más conveniente agregarle un elemento de fijación adicional que no le permita volver a deformarse.

Para ello, basta con preparar en forma casera, una planchuela que tenga en un extremo la posibilidad de ser fijada al marco y en el otro un corte y un doblado que le asegure un buen anclaje en el material. Un ejemplo de este elemento de este tipo se muestra en la foto 5.

 


Foto 5

 

Para fijar este elemento al marco se perfora un agujero en el marco, lo más cerca del suelo que se pueda (foto 6) y se pasa un tornillo. Mediante la correspondiente tuerca se fija el anclaje al marco.



Foto 6


En este caso se usó un tornillo de cabeza fresada para que no interfiera con la hoja cuando la puerta se cierra. Este tornillo conviene que sea de bronce o de acero inoxidable (como en este caso) para que alguna futura humedad no lo pueda volver a corroer. La foto 7 muestra el anclaje atornillado al marco. También se podría soldar un pedazo de varilla de hierro de construcción al marco. Cumpliría la misma función, sólo que tal vez no sea tan fácil conseguir una máquina de soldar para un trabajo tan chico. Además habría que verificar si la chapa del marco soporta una soldadura eléctrica.



Foto 7


Cómo volver a amurar el marco

 

Fijado el anclaje al marco sólo queda volver a amurarlo en su nueva posición. Para eso, conviene comenzar preparando un listón de madera y calzarlo en el marco, tal como se ve en la foto 8, que asegure que, en la operación de reamurado, el marco no se vuelva a cerrar. Trabado éste así se puede completar el trabajo, no sin antes proteger tanto la planchuela de anclaje como la parte interior del marco con algún tratamiento anticorrosivo. Lo ideal es cubrirlo con una pintura antióxida y, una vez seca volver a pintar con pintura asfáltica. De ese modo se asegura una buena protección por mucho tiempo.



Foto 8

 

Sólo resta preparar la mezcla correspondiente, en este caso concreto (una parte de cemento y tres partes de arena) con algún agregado hidrófugo (“ceresita”) para cortar un posible paso de humedad. En le ejemplo que se muestra en esta publicación se reconstruyó la capa aisladora horizontal, por lo que esta última precaución no seria indispensable. Pero nunca están de más las precauciones.

 

Tal como se ve en las fotos 9 y 10, se va rellenando el hueco con concreto y cascotes de ladrillo, evitando dejar espacios vacíos, apretando bien el material. Terminado este paso se pueden rehacer los revoques y terminar el trabajo con el revestimiento correspondiente.

 



Fotos 9 y 10

 

Aclaración: en algunas fotos de este posteo se ve una varilla o grapa del marco original que todavía se conservaba. No fue retirada porque era más complicado sacarla que dejarla. Pero como no se podía ver bien en qué estado se encontraba no se la usó como el elemento de fijación nuevo. Además de no tener en la punta un anclaje apropiado.

 

Recapitulando

 

  •          La humedad ascendente de cimientos hincha las paredes y “cierra" los marcos sobre las hojas, dificultando su funcionamiento;
  •          El fenómeno es de difícil solución en puertas de marcos y hojas de chapa o perfiles de hierro;
  •         Hay que liberar al marco de la presión de la pared picando y retirando material;
  •         Se prepara un elemento de fijación (anclaje) que se fija al marco;
  •         Se coloca un listón de madera que mantenga la luz adecuada en el marco;
  •         Se amura con concreto con hidrófugo, y se prepara para hace las terminaciones correspondientes. Ver foto 11, en la cual también se observa la nueva luz libre de la puerta. Comparar con la foto 1, realizada antes de comenzar los trabajos.


Foto 11