Este es un blog para principiant@s

Mostrando entradas con la etiqueta Albañileria. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Albañileria. Mostrar todas las entradas

martes, 23 de marzo de 2021

CÓMO HACER UNA CARPETA DE CEMENTO (CON CAÑOS DE LUZ)

Generalidades

 

Un paño de material bien plano y nivelado, cualquiera sea su destino (revoque grueso, carpeta de cemento para circulación o para colocación de piso, etc.), no puede construirse a ojo. Necesita un diseño ajustado y una construcción correcta. Por eso hay que hacerlos a partir de puntos y líneas de referencia sobre los que apoyarse para llegar a esos resultados buscados.

En el caso particular de las carpetas de piso, tradicionalmente, se construyen realizando fajas, niveladas, del mismo material (concreto) sobre las que se deslizan las reglas que le van a dar la cara final. Ese método se describe acá.

 

Las carpetas hechas usando caños de luz

 

Una manera de acelerar los tiempos, cuando se trabaja con fajas de material, es acelerar el proceso de fragüe del cemento. Eso se puede lograr agregando yeso a la mezcla, o haciéndola con cemento de fraguado rápido. De cualquier manera obliga a tener esos materiales en la obra, y también implica un costo mayor. Y no siempre garantiza que la faja endurezca los suficiente para poder usarla en el día.

Por eso se puede recurrir a este método de reemplazar las fajas de material por caños de luz, nivelados y bien amurados, que pueden usarse prácticamente en seguida después de ser colocados. Y conviene que sea así para poder retirarlos, también, en el día para que estén disponibles para ser reusados en el siguiente trabajo.

 

Procedimiento de construcción de una carpeta usando caños de luz

 

Obviamente habrá que comenzar por definir el nivel de piso, lo que nos va a dar el nivel de la carpeta correspondiente. Es muy útil representar el nivel del piso terminado (NPT) como una línea continua, sobre las paredes alrededor del ambiente en el que se está trabajando. Eso se muestra en la figura 1.


 

Figura 1

 

De cualquier manera a veces es suficiente con marcar el nivel de piso terminado, NPT, solamente en las esquinas del ambiente, y a mitad del tramo si el ambiente fuera más largo, tal como se muestra en la figura 2.

 


Figura 2

 

Seguidamente se colocan los extremos de los caños de luz según el nivel que indiquen las marcas de NPT, menos el espesor del piso y el del material de colocación (pegamento). Esto se ve en la figura 3.

 


Figura 3

 

Se puede revisar el nivel de los caños de luz con respecto a la marca intermedia, y también asegurarlo con material, como se muestra en la figura 4.

 


Figura 4

 

Hecho esto sólo resta rellenar todo el espacio inferior del caño con material para que ningún tramo quede en el aire y sin apoyo, tal como se ve en la figura 5.

 


Figura 5

 De otra  manera el peso y el movimiento de la regla podrían hacer que el caño se doble y  se baje, generando una depresión en el nivel de la carpeta de cemento. A la vez que podría mover y despegar el caño de luz obligando a tener que volver a empezar el trabajo de nivelación nuevamente.

 

Finalizada esta preparación de los caños-guía se procede de la forma habitual, llenando los espacios entre  de luz, cortando son una regla metálica (o de buena madera y que esté bien derecha). Y en la medida que las carpeta vaya “tirando”, esto es comenzando a endurecer, se puede rellenar alguna zona que haya podido quedar baja; y terminar el trabajo alisando con fratacho de madera. Si la carpeta tuviera como destino ser transitable se puede terminar con llana metálica, espolvoreando la superficie con cemento en polvo, con el objeto de generar una capa superficial más resistente al desgaste.

 

Recapitulando

 

  •          Para acelerar el trabajo al hacer carpetas de cemento se pueden reemplazar las tradicionales fajas de concreto por caños de hierro de electricidad amurados. De esa manera se evita tener que esperar el fragüe del concreto, sobre todo en regiones, o en estaciones del año, muy húmedas;
  •          Definidos los niveles del futuro piso se procede a amurar los extremos de los caños según las marcas de referencia;
  •          Para más seguridad conviene nivelar y amurar también el tramo medio del caño;
  •          Se rellena luego, todo a lo largo, la parte inferior del caño;
  •          Se llena los paños de la manera tradicional y se “corta” el concreto, deslizando las reglas sobre los caños;
  •          Se termina con fratacho o con llana metálica, según el destino final que se va a dar a la carpeta
  •      Se deberán retirar los caños inmediatamente para poder limpiarlos y volver a usar.


Te puede interesar: carpetas de cemento para la colocación de pisos

 

 

miércoles, 27 de enero de 2021

EL FISCHER (TARUGO) SE SALE DE LA PARED!!!

El problema

Al colocar en las paredes tarugos de nylon (tipo Fischer) para fijar, mediante tornillos, algún elemento (desde cuadros hasta estantes) puede pasar que el tarugo entre “flojo” en el agujero que perforamos. Esto ya se va notando cuando la mecha de widia entra demasiado fácil en la pared. Es un indicio claro de que el tornillo no va a “abrir” al tarugo lo suficiente como para conseguir un anclaje correcto.

Esta situación se da, generalmente, en paredes antiguas en las que los ladrillos eran colocados con mezcla pobres en cemento portland, a la vez que los ladrillos podrían ser poco cocidos. O en paredes más recientes en las que acertamos a perforar en algún punto poco compacto de la mezcla, o en alguna zona del ladrillo debilitada. También podría tratarse de tarugos antiguos que no estén cumpliendo bien su función, y que necesiten ser corregidos.


La solución

Entonces, tenemos que el agujero que perforamos, por algún motivo, quedó demasiado grande y al colocar el tornillo en el tarugo Fischer, y querer apretarlo, este comienza a girar. En paredes antiguas el giro del tarugo puede, inclusive, agrandar todavía más la perforación. En estos casos la solución práctica e inmediata es envolver el tarugo Fischer en una tira de tela fina, como de sábana o de pañuelo, y volver a colocarlo en la perforación. De esta manera cuando se comience a girar el tornillo la tela va a ir envolviendo al tarugo, enredándose, generando un “nudo” y, finalmente, rellenando los espacios libres para trabar al tarugo en una posición fija.

 

Es esta una solución tan vieja como los tarugos de nylon pero, generalmente, efectiva. Simplemente, cada vez que vayamos a hacer un trabajo de colocación de tarugo tipo Fischer tengamos siempre a mano un trozo de tela fina de algodón. A veces un agujero que queda grande se puede reemplazar por otro, en otra posición. Pero muchas otras veces la posición es una sola y conviene tener un recurso de emergencia a mano. Recordemos que un tarugo Fischer que no quede bien colocado, y apretado, es candidato a aflojarse. Y, con el tiempo, darnos un susto. Por lo menos.

viernes, 15 de enero de 2021

¿CUANTOS BALDES DE ALBAÑIL SON UN METRO DE ARENA?

Respuesta rápida (para ansiosos):

 

Un metro cúbico (1 m3) de arena son, aproximadamente, entre 

        140 y 150 baldes de albañil

 

Razonamiento (para los más curiosos):

 

Aparece, a veces, la necesidad de “medir” una cierta cantidad de arena, piedra para hormigón, tierra, etc. Sin recurrir a complicadas mediciones, ni fórmulas o unidades, podemos calcular el volumen de los materiales usando como medida el balde común de albañil que suele tener 30 cm de diámetro superior, 20 cm de altura y aproximadamente 15 cm en su base. Tal como se muestra en la figura 1.

 


Figura 1

 

De cualquier manera ni siquiera hay que tener en cuenta estas medidas. Las damos, solamente, para describir un balde de albañil promedio. Simplemente hay que medir la capacidad del balde, o de cualquier otro recipiente, en litros. Para eso basta con llenarlo con agua hasta la altura que se quiera conocer, midiendo la cantidad que se va echando. En la práctica sólo hace falta un recipiente (lata, pote, etc.) del que se tenga la seguridad que tiene un litro de capacidad. Con ese recipiente se va agregando agua. Y contando, por supuesto, cuantas veces lo cargamos para llegar a la altura a la que suelen llenarse los baldes de albañil para medir, o transportar, arena en una obra. Figura 2.



Figura 2

 

En el balde que describimos más arriba se suele llegar a la altura normal de carga con 7 cargas de 1 litro. O sea que el balde de albañil suele contener siete litros de agua.

 

Cómo calcular el volumen

 

Solo tenemos que recordar que 1 m3 de cualquier material, agua, arena, aire, o lo que sea, equivale a 1000 litros de volumen. Inclusive la capacidad de los baúles de los autos se mide de esa manera.

 

Entonces, si:

                                          1 metro cúbico (m3)  =  1000 litros

 

Podemos decir que si dividimos 1000 litros por la capacidad de 1 balde nos va  a dar la cantidad de baldes que representan a 1 metro cúbico:

 



Para redondear, y/o para recordar mejor el número, podemos decir que 1 metro cúbico de arena, o de piedra, equivale a 145 baldes de albañil.

 

Aclaración importante

 

La arena, en particular, modifica su volumen de acuerdo a la cantidad de humedad que contenga. Una arena algo húmeda se “esponja” y ocupa más lugar. Una arena muy seca “corre más” y se aplasta, dando un menor volumen. Esto es algo a considerar cuando se trata con los proveedores de la arena porque el tema suele llevar a discusiones y peleas sobre las cantidades de arena pagadas y entregadas.

 

En este caso podríamos llegar a la conclusión de que, tratándose de una arena con una humedad “normal”, un metro cúbico equivale a 140/150 baldes de albañil. Pero eso siempre va a ser un cálculo aproximado.

 

Nota importante: este método es aplicable a cualquier balde u otro recipiente que se quiera usar para medir el volumen de cierta cantidad de materiales de obra. Simplemente se mide su capacidad en litros de agua y se hace el cálculo correspondiente.

domingo, 29 de noviembre de 2020

HACER EL REVOQUE GRUESO ¿CON CAL Y CEMENTO O CON PLASTICOR (CEMENTO DE ALBAÑILERÍA)?

¿Es lo mismo?

 

Suele surgir la duda sobre si conviene hacer los revoques gruesos con mezcla de arena, cal y cemento, o con mezcla de arena y cemento de albañilería. Y por qué.

Básicamente, es una cuestión de gustos, o de costumbre. En el resultado final no vamos a encontrar mayores diferencias, ni técnicas ni económicas.

A veces se explica que es mejor revocar con cemento porque las cales pueden atacar los elementos de hierro (corrosión) pero es algo que no está demostrado. A diferencia de los yesos, por ejemplo, que sí lo pueden hacer. Por otro lado la cal, por su característica higroscópica (que absorbe la humedad) suele ser agresiva para la piel, por lo que quienes tengan la piel de las manos sensible, y no acostumbradas, deberían tratar de evitar  usar mezclas que la contengan.

 

Fuera de eso las diferencias más notables entre ambas mezclas son:

 

  •          La mezcla de cal es más pastosa, más “cremosa” por lo que es algo más cómoda de trabajar, sobre todo si se va fratachar la superficie del revoque grueso para dejarlo como terminación final;
  •          La mezcla de cemento de albañilería debe ser preparada en la proporción que indican sus fabricantes, ya que de aumentar la proporción de cemento el resultado final puede ser sumamente duro. Una condición que puede ser útil, a veces, pero inconveniente si hubiera que cortar canaletas para colocar las cañerías de las distintas instalaciones.

 

Las proporciones de las mezclas para el revoque grueso

 

La mezcla que se prepara con cal común contiene

1 parte de cal (hidratada)    ¼ parte  de cemento portland    3 partes de arena


La mezcla que se prepara con cemento de albañilería contiene:

1 parte de cemento de albañilería    5 partes de arena     

 

 

¿Para qué más sirve el cemento de albañilería?

 

Otros usos para los que sí sirve:

Cimientos de hormigón de cascotes, mampostería de ladrillos macizos, de ladrillos huecos, de bloques de cemento, contrapisos, carpetas bajo pisos de terminación.

 

Cuándo no se debe usar:

Estructuras de hormigón armado, encadenados, alisados de cemento para transitar, capas aisladoras.


Fuente: Manual Práctico de Construcción. Arq. Jaime Nisnovich. Asoc. Civil. El Hornero  

lunes, 23 de noviembre de 2020

CÓMO RECUADRAR Y REVOCAR UN DINTEL

¿Qué es recuadrar en albañilería?

 

Recuadrar, cuando hablamos de revoques, es cubrir una mampostería (por ejemplo el canto de una pared), o un elemento de hormigón (por ejemplo una columna), con revoque grueso de manera tal que el resultado final presente caras perfectamente “a plomo”, esquinas entrantes y salientes en ángulo recto, lo mismo que el ángulo con respecto a otras partes de la construcción, superficies horizontales “a nivel”, y cantos bien definidos.


Aquí, vas a encontrar más información sobre revoques gruesos 

 

Recuadrando dinteles

 

Cuando se levanta una pared de ladrillos y se revocan sus caras (con grueso) los bordes libres suelen quedar tal como se muestran en la figura 1, en la que está representada una pared que tiene una abertura, probablemente una futura puerta.

 


Figura 1

 

Allí se ve como el albañil hizo el revoque grueso dejando los últimos centímetros de ladrillo sin cubrir. Recubrir (recuadrar) los costados de la abertura (jambas) y la parte superior (dintel) es trabajo de un paso posterior de la obra. En la figura 2 se muestra un detalle de la zona en cuestión.

 


Figura 2

 

Recuadrar un dintel suele ser una tarea que complica a quien recién se inicia en la albañilería. En parte porque hay que revocar “para arriba”, en parte porque no se sabe cómo darle la forma correcta, etc. A continuación se van a sugerir los pasos a seguir para que el trabajo no sea tan engorroso.

 

Paso 1: Colocación de tablas

 

Si el problema es definir cual debe ser la forma final del dintel, la mejor forma es representarla con dos tablas, las que, a la vez que van a asegurar que se tenga el nivel que se decida, contenga el material para éste que no “se escape”. Dichas tablas se pueden sostener con  grampas o ganchos, de construcción casera, de hierro de obra, cuya dureza garantiza que sean lo suficientemente elásticas para que puedan soportar el peso de las tablas. Esta disposición se muestra en la figura 3. Las tablas se colocan en una posición aproximada y se las va nivelando, primero por separado y después entre sí. Lo ideal es usar un nivel de manguera, aunque un nivel de mano, que esté en buenas condiciones, podría usarse para aberturas no demasiado grandes.

 


Figura 3

 

Paso 2: Relleno de las esquinas

 

Una vez fijadas y niveladas las tablas en su posición correcta hay que tener cuidado para que un movimiento brusco accidental no las mueva. Esto le suele pasar aun a los más experimentados. Por eso, para asegurar las tablas, es conveniente,como primera medida, rellenar las esquinas, tal como se muestra en la figura 4. 

 

Figura 4

 

De esa manera, además, se asegura la unión del material de revoque fresco (en amarillo) con el material ya seco de la pared (en gris). El procedimiento sugerido es:

  •          Mojar la zona con agua, usando una brocha o un  rociador;
  •          Cargar material sobre la cara de un fratacho, para usarlo como bandeja;
  •          En el revés de una cuchara pequeña, o un cucharín (se diferencian por el ángulo de la hoja con respecto al mango) se cargan pequeñas cantidades de material y se lo va colocando, no arrojando, en la zona de los ángulos. Se lo descarga cortando contra el borde de la madera de las tablas. Ver figura 6;
  •          Una vez terminado el relleno de las esquinas conviene dejar unos minutos el material para que la pared absorba su agua y asegure una buena adherencia.

 

Paso 3: Relleno final de la cara del dintel

 

Cuando ya el material de las esquinas esté comenzando a “tirar”, esto es a perder el brillo de la humedad y a comenzar el endurecimiento, se continua la carga del revoque. Para empezar, hay que preparar una pequeña cantidad de concreto (1:3) bastante líquido (lechada) y arrojarlo en pequeñas cantidades, con fuerza, hacia el ladrillo desnudo. Esto va a asegurar un fino “puente de adherencia” entre el revoque grueso y los ladrillos. A continuación, con el borde de la cuchara, y en muy pequeñas cantidades, se puede ir arrojando la mezcla de revoque, con cierta fuerza pero con la muñeca suelta, a su posición final. Siempre conviene comenzar a colocar material contra los rellenos de las esquinas del paso anterior, porque es la zona que más rápido va a absorber el agua del material nuevo. Que el material nuevo empiece a tirar lo más rápido posible es el secreto del trabajo de revocar y recuadrar un dintel. Este es una tarea de paciencia, al que no se la puede apurar. Hay que ir cargando capas finas de material y darle tiempo que “tire” antes de continuar. De otra manera la humedad de la capa nueva va a ablandar la capa anterior y todo el trabajo se puede desmoronar. Con el agravante que cuando se quiera volver a colocar el material los ladrillos ya hayan absorbido demasiada agua y no soporten más. Y habrá que dejar pasar un tiempo para que sequen. Por eso revocar dinteles no es un trabajo para ansiosos. El objetivo final es el que se muestra en la figura 5.



Figura 5

 

Quien no se anime a colocar el material arrojándolo con el borde de una cuchara puede recurrir al cucharín y colocarlo “manualmente”. Es decir apoyando el material contra el dintel y deslizando el cucharín para descargarlo. Ver la figura 6. Como en el paso 2.

 


Figura 6

 

Es un trabajo más tedioso,  pero más seguro para un principiante. Siempre dándole el tiempo de secado entre capas. Cuando se anda manipulando el material ya colocado es más probable que tienda a desprenderse, si todavía está fresco. Por eso se prefiere arrojarlo con la cuchara, y no tocarlo. Pero para eso hace falta una cierta práctica. 

 

Paso 4: Retiro de las tablas

 

El paso final, después de usar los cantos para apoyar el fratacho y darle una terminación al revoque del dintel, es retirar las tablas. Esto debe hacerse enseguida de terminado el trabajo, sin permitir que el material seque demasiado, porque las tablas podrían arrastrar el material de los cantos. Mientras se sostienen las tablas en su posición se retira con cuidado las grampas, y se golpean suavemente las maderas, obligándolas a que se deslicen hacia arriba, de manera de no tirar del material todavía fresco, que podría despegarse. Retirar las tablas es una tarea ideal para realizar entre dos personas. Así es más seguro que no se desprenda el material.

 

 

 

 

domingo, 20 de septiembre de 2020

CÓMO SE USA EL CEMENTO RÁPIDO

¿Qué es el cemento rápido?

 

El cemento rápido es una variedad del cemento Portland (el cemento de uso habitual en las obras de construcción) que tiene un tiempo de fraguado (de endurecimiento) mucho menor. En situaciones en las que el cemento común tarda hasta uno o dos días en endurecer, el cemento rápido tarda entre media hora y una hora en hacer lo mismo.

 

¿Para qué se usa el cemento rápido?

 

El cemento rápido se usa para amurar todo tipo de elementos, en aquellos casos en los que haya que habilitar rápidamente el trabajo al uso, o a la circulación.

  •          Se lo usa para amurar rejas, ganchos, guías, rejillas, anclajes de todo tipo;
  •          Se lo usa para colocar aberturas que deban ser puestas en uso en el día;
  •          Se lo puede usar para obturar grietas y fisuras en hormigón (en paredes, tanques, piletas, conductos);
  •          Se lo usa en trabajos de artesanía (floreros, macetas, objetos varios de decoración);
  •          Se lo puede usar para pequeñas producciones de piezas o elementos para la construcción, en los que haya que recuperar, rápidamente, los moldes.

 

Formas de presentación del cemento rápido

 

Dado su costo, algo mayor al del cemento común, y a los usos específicos que tiene, el cemento rápido se  puede conseguir en diferentes presentaciones: en bolsitas de 1 y 2 kilogramos, en bolsas de 5 y 10 kg y hasta en bolsas de 50 kilogramos, como el cemento común.

Sin embargo conviene comprar sólo la cantidad que se vaya a utilizar, porque se recomienda abrir y usar todo el contenido del envase inmediatamente. No es muy apto para ser guardado, si sobrara.

 

Forma de preparación y de uso

 

Hay que calcular bien la cantidad de mezcla de cemento rápido que se vaya a usar, porque una vez iniciado el proceso de fraguado (en el transcurso de pocos minutos) no se puede volver a amasar, ni a ablandar con agua.

Conviene colocar en un recipiente, primero, una cierta cantidad de agua y, después, ir agregando el cemento rápido a modo de lluvia, mezclando bien para que no se formen grumos. Debe quedar una masa blanda pero no líquida.

En este punto es indispensable tener el trabajo, en el que se lo vaya a usar, ya preparado, porque si en ese momento nos alejaramos para buscar algo cuando regresemos el cemento rápido estará comenzando a endurecer.  

Si bien los tiempos de fraguado pueden variar según los distintos fabricantes, es conveniente tomar, como referencia general, que en un minuto el cemento rápido comienza  fraguar, y que a los 30 minutos el endurecimiento es casi total (si  bien, como todo cemento, puede haber un endurecimiento posterior que no es muy significativo).

 

Recomendaciones para cuando se esté usando cemento rápido

 

  •          No se debe usar mezclado con otros aglomerantes (cal, yeso, etc.);
  •          Si se le agrega arena (hasta una relación de 1:3) ésta deberá estar limpia y sin restos vegetales. Lo mismo se aplica al agua de amasado;
  •          Es necesario limpiar la zona de aplicación de grasas, ceras, pinturas, polvo, etc.;
  •          Conviene humedecer la zona pero sin que se vea agua superficial;
  •          Proteger los trabajos de las altas temperaturas ambiente;
  •          Curar (humedecer) continuamente, sobre todo en los primeros momentos posteriores a la colocación;
  •          No usar con temperaturas menores a los 5 grados ni mayores a los 30 ºC;
  •          Es necesario destacar que con el fraguado aumenta la temperatura, y en climas calurosos el endurecimiento puede ser más rápido que lo dicho anteriormente;
  •          Es conveniente lavar recipientes y herramientas inmediatamente después de su uso.

 

Comentarios finales

 

  •          El uso de cemento rápido se puede reemplazar, a veces, por cemento común con un agregado de yeso de construcción. Con eso se acelera el endurecimiento de la mezcla, pero el resultado final no va a adquirir la resistencia del cemento rápido, ni tampoco es apto para trabajos que vayan a quedar a la intemperie.
  •         Hay variantes de cemento rápido: son los cementos ultra-rápidos para la obturación instantánea de fugas de agua. Se los puede aplicar aún con el agua corriendo. Se los prepara, se los coloca con las manos (enguantadas) y se mantiene apretado hasta que fragüe, cosa que se nota por la temperatura que levanta.

 

 

jueves, 30 de julio de 2020

CÓMO LEVANTAR UNA PARED, ELECCIÓN DE LOS CIMIENTOS

Definiciones


Cimiento o fundación es la parte de lo edificado que está en contacto con el suelo y al que le transmite el peso total de la construcción, sea un edificio completo o sólo una pared aislada. El suelo se va a deformar, a hundir; pero deberá resistir lo suficiente como para que lo construido no se deteriore o rompa.

Elección del tipo de cimiento


Al momento de elegir el tipo de cimiento que se va a usar dos son los datos que se tienen que tener en cuenta: el peso total de la construcción (expresado en toneladas o kilogramos) y la resistencia del terreno (expresado en kg/cm2)  sobre el que se va a construir. Sólo a título informativo, un suelo que un valor de resistencia de 2 kg/cm2  es considerado muy apto para soportar un edificio.

  •    Si consideramos una pared aislada tenemos, tal como muestra la figura 1, la superficie de apoyo que se le deberá dar varía en función de la calidad del suelo en que se va a apoyar. En suelos muy resistentes, en teoría, se podría apoyar una pared directamente sobre el suelo, sin ensanchar su base. Pero sucede que los terrenos más resistentes suelen ser más o menos rocosos, y suelen coincidir con zonas geográficas donde hay riesgo de terremotos. Y por eso, tal cómo vamos a ver más adelante, la pared tendrá una base mayor que la que el suelo pediría;
  •    En terrenos menos duros, con suelo vegetal superficial (tierra negra), y arcillas y toscas en las capas más profundas, la pared se deberá ensanchar algo en su base de apoyo;
  •    Y en terrenos muy blandos, húmedos, arenosos, etc., la base de la pared tendrá que ser mucho más ancha que la superficie de apoyo.


Figura 1 

Algunos tipos de cimientos y su uso más frecuente


Viga de encadenado de HºAº


Se trata de un cimiento continuo, construido en hormigón y reforzado con armadura de varillas de hierro de construcción que tendrá un ancho similar, o algo mayor, que la base de la pared misma. Se usa cuando en la pared no haya cargas concentradas en algunos puntos (cómo columnas) sino que su peso se reparte en forma uniforme a todo el largo de la viga de encadenado. Se usan en terrenos muy buenos. Figura 2 (a).



Figura 2

Base aislada de HºAº


Cuando en una construcción, además de una viga de encadenado que soporte el peso  uniforme de las paredes, haya columnas que soporten otros pesos se deberá agregar un cimiento adicional, cuadrado o rectangular, que descargue su carga a tierra. Será una base o zapata aisladas, construidas en hormigón y reforzadas con parrillas de hierro de construcción. En este caso las vigas de encadenado serán tramos entre base y base. Se usan en terrenos buenos. Figura 2 (b).

Pilotines de HºAº


El sistema de cimientos conformado por vigas de encadenado y pilotines es un sistema usado generalmente en paredes sin columnas, donde a la capacidad de resistencia de la viga de encadenado se la acompaña con pilotines, elementos estructurales puntuales, de poco diámetro y largo variable, que permiten descargar en capas de terreno más profundas y resistentes. A la vez también colaboran trabajando a la fricción contra los costados de la perforación.  Figura 3 (c).



Figura 3

 Viga de encadenado sobre zanja de piedras


Es el tipo de cimiento recomendado para apoyar construcciones menores en zonas áridas, o semiáridas, que, a pesar de tener un suelo muy resistente, se encuentren en zonas geográficas con alto riesgo de movimientos sísmicos ocasionales. La viga de encadenado le da el suficiente cimiento continuo a la construcción, a la vez que la zanja de piedras absorbe los movimientos sísmicos que podrían llevar a su deterioro o destrucción. Figura 3 (d).

Zapata corrida de HºAº



Figura 4

Cuando una pared necesite varias bases aisladas, demasiado cercanas unas de otras, (figura 4) se las suele “unir” entre sí y convertirlas en una zapata corrida, de igual perfil todo a lo largo de ella. Esto puede insumir un poco más de materiales pero requerirá menos trabajos de excavación, y menos trabajo de armado y llenado de los cimientos. Figura 5 (e).



Figura 5


Platea de fundación de HºAº


Figura 6 

Cuando una serie de paredes con columnas necesiten de un conjunto de bases aisladas que superen el 50% de la superficie de la edificación, como en la figura 6, se puede optar por una fundación en forma de losa de Hº, reforzada con una doble malla de varillas de hierro (superior e inferior). En la línea de las paredes se agregan vigas inferiores reforzadas con armaduras de hierro. Ver la figura 7 (f). Las columnas se ubicarán en los cruces de esas vigas de refuerzo.


Figura 7

Aclaración


Todo lo dicho hasta aquí es a título informativo. Si bien en algunos casos se puede recurrir a la experiencia de quienes viven o trabajan en la zona donde se va a construir, en general, la elección y el diseño de los cimientos de las edificaciones importantes los hacen profesionales especializados en diseño de estructuras en consulta apoyados por profesionales especializados en ensayo y determinación de resistencia de terrenos.

Recapitulando


  •     Cimiento o fundación es la parte de la construcción que se apoya sobre el terreno;
  •     Su tipo y tamaño dependen del peso de lo edificado y de la resistencia del terreno;
  •     Hay cimientos y fundaciones puntuales, continuos o totales que se adaptan a cada caso;
  •     En edificios menores se puede consultar a quienes tengan experiencia la zona;
  •     En edificios importantes el diseño de los cimientos estará a cargo de profesionales especializados en estructuras en consulta con profesionales especializados en el estudio de suelos.