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miércoles, 14 de octubre de 2020

EL “RETORNO” EN LOS CIRCUITOS DE ILUMINACIÓN

El circuito de iluminación

 

En instalaciones eléctricas domiciliarias, los circuitos de iluminación son instalaciones en las que hay un artefacto lumínico, un sistema de cables y un dispositivo que comanda (enciende o apaga) ese artefacto. El esquema general es el que sigue:

 

                                   

Figura 1

 

Principios básicos de los circuitos de iluminación

 

Un artefacto de iluminación, al que por comodidad vamos a llamar sólo “lámpara”, necesita, para funcionar, ser alimentado por los dos cables que transportan la energía eléctrica en las instalaciones domiciliarias. Uno de esos cables ese el “vivo”, llamado fase, y el otro es el neutro. Al “vivo” se lo identifica con el color marrón y al neutro con el color celeste. Fig 2.

 


Figura 2


Nota importante!

Por cuestiones de comodidad y simplificación, no incluimos en los gráficos el cable de puesta a tierra pero remarcamos la necesidad de su uso en todo artefacto, o aparato, conectado a la red de energía eléctrica.


Acá hay más información sobre la puesta a tierra 

 

Ahora bien, por cuestiones de economía los reglamentos permiten que uno de esos cables quede permanentemente conectado a la lámpara y que el otro cable se conecte o desconecte para su funcionamiento. Es por eso que los interruptores o llaves que se consiguen en el comercio para estas instalaciones son del tipo “unipolar”. Es decir que pueden cortar sólo un polo o cable. Nada impediría que se usaran llaves “bipolares”, es decir que cortaran los dos cables, pero serían más costosas y voluminosas, habría más recorrido de cables y toda la instalación eléctrica sería más cara y complicada.

Por cuestiones de seguridad el cable que se deja permanentemente conectado a la lámpara es el cable neutro, y se corta la fase o “vivo” que, como su nombre lo indica, es el cable peligroso, el que conduce efectivamente la corriente. La figura 3 muestra esta disposición.

 


Figura 3

 

La cuestión del “retorno” en los circuitos de iluminación

 

La figura 3 representa un esquema básico y general de un circuito de iluminación, pero no es el circuito que más comúnmente se dé en la realidad de las instalaciones eléctricas domiciliarias. En la práctica, por comodidad y por economía, los cables principales suelen correr por caños a lo largo de las losas, o en los cielorrasos, donde también suelen estar instalados los artefactos de iluminación. Por lógica las llaves o interruptores se colocan al alcance de la mano de los usuarios, más o menos a 1 metro de altura sobre los pisos. Por lo tanto el esquema de circuito de iluminación más habitual es el que se muestra a continuación en el figura 4.

 


Figura 4

 

Allí se ve que la alimentación eléctrica corre a la altura de la lámpara, que el cable neutro (celeste) está conectado directamente, mientras que del cable vivo sale una derivación hacia abajo, hacia la llave de luz. En ese tramo del cable siempre hay corriente. Al comandar la llave se hace pasar la corriente que prende o apaga la lámpara. Y la corriente, que “vino” hasta la llave, “vuelve” hacia la lámpara. A esa “vuelta” hacia arriba de la corriente se la llama retorno. Por eso a ese cable, que conviene que sea de un color distinto a los tres reglamentarios (marrón, celeste y verde con amarillo), se lo llama, simplemente, el retorno. Lo que parecería un detalle menor es de mucha importancia en la práctica, cuando se está pasando los cables por los caños, en las obras.

 

En el caso de una sola lámpara y un solo interruptor es más fácil diferenciar al vivo que alimenta y al retorno que vuelve. Pero no es raro que desde una misma posición se comanden dos, tres e inclusive más artefactos. Y todas esas llaves van a ser alimentadas por un solo vivo, o fase, pero van a ser varios los retornos. Y que puede estar, todos, dentro de un mismo caño. En la figura 5 se ve un ejemplo de esto:

 


Figura 5

 

La necesidad de identificar, dentro del caño, cada cable para su correspondiente conexión, hace que sea conveniente llamar a cada cable según la función que cumplen. Por eso en los trabajos de electricidad se usa este  término de retorno para esos conductores que llevan la corriente desde las llaves hacia las lámparas, y todo el que participa de la obra sabe de que se está hablando.

 

Recapitulando

 

  •          Las lámparas se alimentan con dos cables, el “vivo”, o fase (marrón), y el neutro (celeste);
  •          El neutro está permanentemente conectado a la instalación;
  •          Por cuestiones de seguridad las llaves o interruptores se instalan sobre el “vivo”;
  •          Al cable que lleva la corriente hacia las lámparas se lo llama retorno;
  •          Conviene que los retornos se identifiquen con colores diferentes a los reglamentarios.

 

 

 

 

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